de la vida, los winners y otros menesteres…

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A ratos no entiendo algunas cosas de la vida. No voy a meter a dios y a sus secuaces en esto, ni a las creencias ni a la fe, es la vida, que hace que al más imbécil le vaya bien, y a la mejor persona le cueste más. ¿Por qué? ¿Qué hace que esto sea así? ¿Por qué siempre el winner gana y a los que no lo son, la vida no los hace ganar? No lo entiendo. ¿Qué le enseño a mi hija entonces?, ¿a ser winner, por ende exitosa, tenerlas todas, o a cultivar valores positivos, no pasando a llevar a nadie, con el costo que esto tiene? Obviamente soy una persona de buenos valores, pero cuesta creer que eso te llevará a alguna parte más que alguien diga “ah, qué bueno eres”, la raja, pero de espaldarazos uno se nutre, pero no vive. Entonces, ¿qué hacer? ¿Seguir esperando a la vida o empezar a despedazar al del lado con fines propios y mandar todos los valores a la chucha y ser uno más de la manada de imbéciles que ganan? Sé que la vida no hace las cosas sola, que uno es quien tiene que mover los hilos y actuar, que “el que no llora no mama”, pero siempre he tenido la convicción de que “el que llora” es un wea, ¿entonces?

Es sabido que el que pide aumento de sueldo en la oficina, levantando la voz, incluso cagando a otros, es el que se lo lleva, no así quien hizo mejor la pega y se quedó callado; si vas a pedir un favor, siempre habrá un pago por ese favor, jamás será de buena onda; tanto perico grosso que debe millones, pero de seguro las casas comerciales huevean al que debe 100 lucas y así, miles de cosas que indican que hay un formato de personas que gana y otro que no. No hablo de ganancia económica solamente, hablo de ganar en la vida, que se te haga todo tan fácil como a ese imbécil, que todo fluya como parece fluir en la casa del winner, que si has sido una buena persona, chucha, te toquen cosas buenas, supongo que es lo lógico ¿no?…

A veces encabrona ser alguien tan bueno y de buenos valores, y ver a gente muy buena con mala raja, y dan ganas de pasarse pal otro bando y ver qué se siente ser el hueón que siempre gana, el winner.  Sé que no lo haré nunca, pero dan ganas.

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