¡Tienes 15 minutos para ver a tus hijos!

Hace unas horas, leí un post, que decía lo siguiente: “A lo que llega la estupidez humana… que tenga q ver a mis niños en sus colegios (15 minutos) y no donde viven, ni siquiera donde yo vivo. Paz ciencia!!! Y esto gracias a gente bocona e inconsciente” bueno, este post, es de un amigo, que por lo que se ve, no lo está pasando nada de bien.

El tema de la separación y los cabros chicos involucrados, es tan viejo como el hilo negro. Generalmente, son ellas, las que se quedan con los pendex, por ende, son ellas, las que impiden que los niños vean a su padre. No he escuchado nunca, que sea al revés. No me meteré en tema platas, responsabilidades compartidas, y esas vainas, porque no las manejo. Pero, creo, que es tiempo, que algunas mujeres, se den cuenta que los errores de los papás, no son errores de los niños. Que mis peleas con ella, no son peleas con ellos. Que la rabia que ella me tenga, no la tiene que llevar a los niños. Es una jugada burda, sucia, asquerosa la verdad. Pero los hombres, estamos cagados, no tenemos opción alguna de alegarlo.

¿Por qué jugar con los sentimientos de pendejos que están en pleno desarrollo de sentimientos? Justamente por eso, ellas creen, que haciendo esto, “ganan  puntos”, pero déjenme decirles que no, que es todo lo contrario. Los niños, tarde o temprano crecen, y culpan, y cobran, y piden y exigen, y llegará el día, que estos mismos pendejos crezcan y llegue la hora de elegir. ¡Y ahí te quiero ver cabrita!

Las mujeres no entienden, que nosotros, al vernos atrapados y con poco tiempo, hacemos de esos 15 minutos, de esa hora, una fiesta, por ende, con nosotros, son libres, lo pasan bien, comen rico, salen, juegan, etc. Son felices. Llegan a su casa, y la cara de culo aparece, ¿con quién se quedarán al momento de elegir? Con quien le haya dado más afectos, más tranquilidad, más paz, más abrazos. Y si tenemos, como mi amigo, tan poco tiempo, aseguro que serán 15 minutos seguidos, de abrazo, cosas buenas, risas y ademases. Las mujeres, a veces, no entienden nada. Y esto no es un tema de géneros, de machismo de nada, ojo, es un tema de relaciones humanas, en donde, por siglos, han sido ellas, las que coartan la felicidad de los niños, no nosotros. ¿Y si fuera al revés? ¿Si nosotros no dejáramos ver a los niños a su madre? Seríamos unos tiranos, unos malditos, unas mierdas, pero como pasa de la otra forma, y es “normal”, nadie dice nada.

Hay poco que discutir en este tema, porque la sartén, la tienen ellas por el mango, pero sólo esperen que el tiempo pase y los niños piensen y decidan por si solos, seguramente, esos 15 minutos, se transformarán en toda una vida, y para el otro lado, habrán 15 minutos, con suerte.

Compadre, solo paz-ciencia, como dijo, y el resto, lo hace la vida, nadie más.